Hoy es una fecha importante para la comunidad que sigue nuestras publicaciones en cualquiera de los espacios donde exponemos. Es cumpleaños del máximo benefactor de Síndrome de Williams México, y aunque no le gusta la atención pública y permanece siempre discreto y silente, es gracias a él que este proyecto tiene vida y llegamos a tocar la vida de tanta gente. Merece reconocimiento su generosidad.
Abuelos gozosos de tener a Daniel al año y medio |
Alfredo es un modelo de vida a seguir, es médico pediatra y lo hace excelentemente, sus pacientes dicen que sólo con verlo sienten alivio a su malestar, centenas de familias han pasado por su atención durante más de 40 años. Y ni que decir que su profesión ha ayudado mucho a la consolidación de éste proyecto, es él uno de los principales asesores de las publicaciones médicas que Síndrome de Williams México pone a su disposición. Es quien da el principal aporte económico para que muchos de los beneficios, proyectos e investigaciones que hacemos para el Síndrome de Williams, sean posibles.
Es un amigo discreto, de pocas palabras pero gran humor, amable y tranquilo, de corazón bondadoso, siempre dispuesto a ayudar a quien lo necesite. Fue con sus padres, el mejor hijo. Veló por ellos y siempre procuró llenarlos de compañía, atención médica y cariño hasta el último aliento de ambos padres. Y le aprendió bien la lección a la abuela, pues como padre es inmejorable, es el eje de la familia, ecuánime y honrado. Es él quien con su conducta enseña que la generosidad y el agradecimiento son virtudes que no sólo se aprenden, se viven y se sienten.
Como abuelo es adorable, cuando está con sus nietos es un niño con bigotes que ríe y juega con ellos a la par. Los bromea y se llena de las risas de sus nietos. Es pilar fundamental en la vida de Daniel, pues no sólo lo considera su nieto, es su padre, su amigo y ambos se hacen acompañan y se dan ánimos para vivir alegremente acompañándose. Su ejemplo deja la vara muy alta para siquiera medirnos en su grandeza.
Te amo mucho papá! Y te agradezco todo el beneficio que tu apoyo, amor y generosidad le ha dado a la vida de Daniel y mía. Sin ti, ninguno de nosotros seríamos o estaríamos como ahora. Espero hacer una buena labor al replicar tu apoyo al colectivo Síndrome de Williams, haciendo así que tu brazo pueda dar cobijo a cientos de familias, honrando tu ejemplo.
Gracias es una palabra corta para la emoción de tenerte en nuestras vidas.
¡Feliz cumpleaños!
Fotos: Blanca QF/instagram y archivo.